martes, 22 de enero de 2013

I EME BÉ CE I ELE.


Sonríe. No te pido más. Pasa de todo, nada ha cambiado. Deja de sentir, a estas alturas sabes que no es tan difícil. Sé feliz. Baila como una loca con cualquier canción, que sé que te encanta. No pienses, seguramente esa sea la parte más complicada de este absurdo contrato que firmas con cada tecla que pulsas. Sonríe, que ahora que se han ido para siempre esos malditos braquets no tienes motivos para no hacerlo. Haz muecas al espejo, despeja la mente, mientete y ríete de ti misma al ver lo absurdas que suenan tus mentiras.¿Escapar? Para qué, si tienes 15 estúpidos años y nada de lo que hagas va a durar, deja de meterte ideas tontas en la cabeza y escúchame, escúchate, da igual lo que sientas, digas, recuerdes, nada es para siempre y menos a estas edades de las que solo se recuerda que fueron "los mejores años de tu vida". Deja que el futuro venga cuando tenga que venir, no decidas lo que te va a pasar cuando crezcas, ya pasará solo. Que si es cuestión de años no mires los que tienes, mira los que te quedan, pueden ser millones, todo depende de cómo los vivas. Sé una imbécil, la mayor de las imbéciles, no importa nada más. 

"No seas una idiota, sé una imbécil, compórtate como tal, acorde a tu edad, disfruta, y solo dale importancia a las cosas que de verdad la tengan."

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