sábado, 26 de febrero de 2011

No es necesario saber para querer aprender.

Necesito terminar con esto, tú lo sabes, no disimules, se me nota en la mirada, en cada vez que hablamos, en mi forma de entablar conversación, en que ya no me preocupa lo que haces con los demás, o al menos eso quiero pensar. Mi mente te grita que ya no quiere seguir dependiendo de ti, que no quiere seguir acostumbrándose a la rutina de tus largas pausas y tus distracciones, pero mis manos no le hacen caso a mi mente, simplemente escriben lo que tú quieres leer, tienen miedo a hacer algo de lo que arrepentirse, algo que no tenga remedio, simplemente esperan a que con el tiempo, poco a poco, las cosas cambien y consiga desprenderme de ti, de tu sonrisa, de tu olor. De momento seguiré así, ahogándome entre lágrimas que no llegan a salir al exterior y recordando momentos, que ahora se tornan horribles, solo porque tu formas parte de ellos.

viernes, 18 de febrero de 2011

Me falta ella


Te acabas de ir y ya te echo de menos, siento un gran vacío dentro de mi. No se cuando volveremos ha hablar, si será pronto o dentro de mucho tiempo, pero se que no estas. Y que simplemente te necesito, eres tú la persona que me da la vida, sin ti todo es gris y las ideas se me nublan. Necesito a una amiga como tú a mi lado, me haces falta, demasiada, creo que empecé a depender de ti, de tu felicidad, pero eso no me importa, porque lo único que importa eres tú. Muchas gracias por ayudarme siempre y en todo, muchas gracias por estar ahí, y sobre todo, muchas gracias por dejarte aconsejar y por confiar en mi para que te ayude. Simplemente eres maravillosa. Nunca cambies. Te amo.

martes, 15 de febrero de 2011

Don't trust anymore

Extraña la sensación de echar de menos a quien tienes constantemente a tu lado. Yo creo que más bien echo de menos los sentimientos compartidos, todas esas largas noches sin parar de hablar. Era bonito y a la vez triste de ver como todo se desvanecía. Ahora no quedan más que recuerdos, aquellos que yo guardé con mucho cuidado, porque tú ni siquiera los tuviste, no sentías lo mismo que yo, por eso solo me quedó imaginar.

viernes, 4 de febrero de 2011

A mí no me trae mala suerte el color amarillo


Escucho música, me dejo llevar, nada me detiene ahora, es una sensación muy parecida a la libertad, y sí, digo parecida, porque nunca será libertad en todos sus sentidos, sea como sea seguiré encerrada en estas cuatro paredes, que vendrán conmigo a donde valla, porque no podré viajar a donde me plazca y tirarme semanas, puede que meses recorriendo las calles de Liverpool, intentar hacer realidad mis sueños y ayudar a todo el que me deje hacerlo, no, eso no será posible, mi mente, mi destino, mi carácter y, cómo no, el dinero, osease mis cuatro paredes, no parecen dispuestas a colaborar, de momento las dejaré ahí, pero yo se que llegará el momento de romperlas, y ese momento será mi momento de libertad.

martes, 1 de febrero de 2011

Extraño momento de debilidad


Será mejor volver otra vez dentro de mi caparazón, donde todo era de color rosa, donde me creía cada mentira, cada falsa apariencia. Quiero volver al lugar donde nada me hace daño, porque la ignorancia es lo que reina, y con ignorancia se vive feliz, porque prefiero eso a tener que soportar una y otra vez la misma caída, mejor seguir fingiendo que no ves lo que realmente sucede. Prefiero seguir escuchando esos "Mientras vivas bajo mi techo harás lo que se te diga", o "cuando seas mayor comerás dos huevos". Pues yo no quiero comer dos huevos, no quiero crecer, prefiero vivir en la ignorancia a vivir con miedo a darte cuenta de lo que pasa.

3. Ya es todo un éxito


Ella se levantó de la cama, como si nada hubiera pasado.
-Ya veo que tu fama esta bien merecida-, comentó sin ni siquiera mirarle, y acto seguido empezó a andar por la habitación recogiendo cada una de sus prendas y se fue vistiendo tranquilamente.
-¿A qué te refieres?- dijo él recorriendo sus curvas con la mirada, centímetro a centímetro como quien estudia un rostro antes de dibujar el más perfecto de los retratos.
-No, nada, simplemente es que ni siquiera sé tu nombre y has conseguido que quiera que esta noche no acabase nunca-. Descolgó el bolso del perchero y salio del apartamento sin decir nada más.